Después de comer, el autobús que nos va a llevar a Villarén de Valdivia, nos espera en la Plaza
de San Lázaro.
Allí nos reunimos todos y vamos subiendo en orden.
¡¡NOS VAMOS!!
El Monte Bernorio es una montaña de 1.170 msnm cuya cima
tiene una forma plana que se extiende en unas 28 Ha.3
Dominando una gran llanura, se encuentra junto a la
localidad de Villarén de Valdivia, que pertenece al municipio de Pomar de
Valdivia, en la Montaña Palentina, a 7 km de Aguilar de Campoo y próximo a la
Autovía Cantabria-Meseta.
En las cercanías de Monte Bernorio, a unos 2 Km. de
distancia, se encuentra el yacimiento del
campamento romano del Castillejo.
Ocupaba una superficie de 18 Ha. que, junto con el perímetro defensivo exterior -formado por un agger de tierra y piedra con valli y una fossa fastigata- alcanzaba una extensión de 41 Ha., siendo el mayor campamento romano documentado en Europa.
Dadas sus dimensiones, pudo albergar a dos legiones en su
interior.
El yacimiento fue declarado, en 1992, Bien de Interés
Cultural, con la categoría de Zona Arqueológica.
A pesar de que la Junta de Castilla y León cesó en 2004 sus
aportaciones económicas para subvencionar las excavaciones, éstas han continuado
gracias a las ayudas de la Diputación de Palencia y los ayuntamientos de la
comarca.
Gracias a estos apoyos, se creó el Instituto Monte Bernorio
de Estudios de la Antigüedad del Cantábrico, que proyectó en 2009 la creación
de un centro de interpretación de este yacimiento.
Y a este Centro de interpretación llegamos nosotros, con
ganas de aprender un poquito más.
Aquí se reúnen las réplicas de algunos de los hallazgos
encontrados en Monte Bernorio.
También se representan los hábitos y lugares que se
encontraban entonces en cualquier campamento romano.
A través de este Centro de Interpretación, podremos hacernos
una idea de cómo vivían las tropas militares romanas.
Y como no, la poderosa Legio III Macedónica de la que se
cree provienen los restos arqueológicos hallados en las inmediaciones de Monte
Bernorio
Será por tanto, una preparación para la excursión posterior.
Salimos del Centro de Interpretación, y nos subimos de nuevo
al autobús.
Va a dejarnos al pie de Monte Bernorio.
El resto habrá que hacerlo andando (aunque algunos subimos
en el coche del guía) lo que nos traerá más de una experiencia de “esas que
contar a los nietos”.
Los que subimos en coche, nos dedicamos a meternos en todos
los baches que encontramos.
Se asemeja más bien a una montaña rusa, y parece
que estamos huyendo de alguien…
Aun así nos reímos un rato.
Arriba esperamos al resto.
Se han equivocado un poco al informarnos de la longitud del camino, y esperamos ansiosos a que lleguen los que suben andando.
Cuando ya hace un rato que estanos todos escuchando las
explicaciones del arqueólogo que ejerce de guía…. Aparecen Raúl, Mª Jesús y
algunos más, que “se habían perdido”.
Han seguido subiendo la montaña y cuando nos encuentran, nos
cuentan que está a punto de venir el Seprona a buscarles.
Es lo que nos hubiera faltado…
El Monte Bernorio es una elevación situada junto a la localidad de Villarén de Valdivia, al norte de la provincia de Palencia (España) en la que se han localizado importantes vestigios arqueológicos, además de restos de una ciudad fortificada cántabra, que superando las 120 Ha es una de las más grandes halladas en España y también en Europa.
Se trata de uno de los yacimientos arqueológicos más
importantes de la época prerromana en la península, también conocido como
Castro de Monte Bernorio.
Su cima está formada por una meseta en forma de óvalo de 750
metros de longitud por 350 de anchura.
Dado su carácter estratégico, fue ocupada desde el siglo IV a.C., según afirman algunos autores, lo que dio lugar a la construcción de un castro cántabro con dos recintos yuxtapuestos.
La cerca externa es de línea continua, rodeando la cima del
monte, mientras que la interior ocupa la parte más elevada, el extremo
Noroeste.
En ambos casos la muralla es de piedras bien trabadas en
seco, siendo probablemente posterior la construcción del segundo recinto,
debido quizás a la presencia romana en la zona.
El Castro de Monte Bernorio ha sido identificado por algunos
autores como la ciudad cántabra de Bergida, que fue la primera atacada por las
legiones romanas durante las Guerras Cántabras, cuyos habitantes se supone que
huyeron al Monte Vindio, aunque a esta mítica ciudad le han sido atribuidas
otras varias localizaciones.
En el siglo I a. C., el Imperio romano comenzó su asalto definitivo a los territorios dominados por cántabros y Astures, llevado a cabo por el emperador César Augusto.
En las proximidades de Pomar de Valdivia se hallaron los restos de un campamento romano de grandes dimensiones, uno de los más grandes de Europa, estudiado por Eduardo Peralta Labrador, desde el cual se llevó a cabo el ataque y destrucción de la fortaleza de Monte Bernorio, parece ser que a cargo de la poderosa Legio IIII Macedónica.
Por las dimensiones de este campamento, Peralta mantiene que
tuvo que ser ocupado, como mínimo, por dos legiones.
La gran cantidad de proyectiles de artillería romana hallados en la zona dejan constancia de que el asedio a que fue sometido el castro se produjo a gran escala, como lo prueban las puntas de flecha, puntas de proyectil de ballesta y bolas de piedra de distintos calibres encontrados.
También se han encontrado evidencias de que el núcleo
principal fue destruido por un incendio, posiblemente provocado tras su toma.
Después de un largo asedio por parte de la Legión IIII
Macedónica, el castro fue sometido al final de las guerras cántabras,
asentándose las tropas romanas en la localidad de Herrera de Pisuerga con el
fin de controlar y pacificar la zona, reparando y ampliando las fortificaciones
del castro desde donde controlaban dos vías militares, una de las cuales se
dirigía a Julióbriga.
Tras la guerra Augusto entregó en recompensa estas tierras a
la legión.
Con la llegada de los visigodos, fue de nuevo escenario de
enfrentamientos hasta el sometimiento de la comarca por Leovigildo.
Posteriormente levantaron en lo alto de Monte Bernorio una
fortaleza con el fin de defenderse de las invasiones árabes.
La última ocupación militar de su cima tuvo lugar durante la
Guerra Civil 1936/39.
Su estratégica posición costó muchas vidas a ambos bandos,
pudiéndose observar aún en su cumbre restos de las trincheras y nidos de
ametralladoras.
A finales del siglo XIX tienen lugar las primeras excavaciones
realizadas en Monte Bernorio llevadas a cabo por Romualdo Moro en 1890 por
encargo del Marqués de Comillas, conservándose los hallazgos encontrados en el
Museo de Comillas, en Santander.
Durante los años 1943 y 1944 es de nuevo objeto de estudio
al incluirse el castro dentro del Plan Nacional de Excavaciones Arqueológicas,
que posteriormente tienen continuidad durante los meses de julio y agosto de
1959 con una nueva campaña de excavaciones dirigidas por Julián San Valero
Aparisi, estando depositados los diversos objetos encontrados en el Museo
Provincial de Arqueología de la capital palentina.
Dentro de los objetos descubiertos en este castro, destaca
un puñal denominado de Monte Bernorio, de unos 30 cm., que puede fecharse entre
los siglos IV-III a. C. También se localizó en las inmediaciones la necrópolis
situada junto al camino que conduce a Villarén.
Según los autores clásicos Floro y Osorio, la ofensiva
romana partió desde Segisama (Sasamón, Burgos) bajo el mando directo del
emperador Augusto, que dividió a sus tropas en tres columnas para establecer el
frente bélico cántabro en tres zonas diferentes. Uno de los principales núcleos
de resistencia sería el oppidum de Monte Bernorio.
Si bien algunos autores barajan la posibilidad de que fuera
el propio emperador el que dirigiera el asedio de Monte Bernorio, el profesor
Eduardo Peralta -director de las excavaciones en el lugar- señala a C. Antistio
Veto, legatus de la Tarraconensis, como el ejecutor de la ofensiva, tras la
enfermedad de Augusto que le obligó a retirarse del frente cántabro.
Los últimos hallazgos realizados en el Bernorio confirman
este yacimiento como uno de los más importantes de Europa.
Monte Bernorio se encuentra en la Lista roja del Patrimonio
de la asociación Hispania Nostra.
Existe un Proyecto de Intervención Arqueológica, "Monte
Bernorio en su entorno", gestionado por el IMBEAC y financiado por las
administraciones públicas así como la Universidad Complutense de Madrid para
aumentar el conocimiento sobre el lugar.
Después de una tarde cultural extraordinaria y del disfrute
de un paisaje sin igual, toca volver.
Está anocheciendo y el autobús nos espera abajo.
Volvemos a subirnos en el coche unos (los “paraliticados”) y
a bajar el monte otros.
Los primeros, tendremos la suerte de encontrarnos con un
pastor y sus 400 ovejas, en perfecta formación gracias al cuidado de dos perros
enormes.
También nos tocará “sujetar” al conductor, que enfadadísimo por
la tardanza (hay futbol y se lo va a perder) arranca el autobús y lo vuelve a
parar como conjurando al tiempo para que se detenga.
Y llegamos al final de este curso.
Nos tocará esperar unos meses, pero el verano que viene,
volveremos a reunirnos una vez más para aprender más de la cultura Romana
antigua.
¡¡Ya queda menos!!